martes, 22 de junio de 2010

SOS



Hoy acepto que sos mi enemigo cada noche que me embriagas en alcohol.
Me persuades con una copa tras otras con la excusas de borrar mi dolor.
Miles de lunas hemos visto juntos, pero jamás me escuchas cuando te digo que no.

Vos me drogas, me embriagas, me besas o te besan; cada noche es peor.
Junto a ti he pasado las más temibles experiencias: me recoges, me tiras, me ahuyentas, me pones en peligro y disfrutas bañándome en destilación.

Sos el zorro disfrazado que disfrutas la vida haciéndome y haciéndote sufrir. Cada vez que a cientos de millas por horas nos arriesgas te hace feliz; cual brebaje de adrenalina narcótica que necesitas para sobrevivir.

Sobre acantilados nos has balanceado y con espinas muchas veces nos cortas en busca de un sorbo más de tu droga alcaloide.

Tanto hemos soportado y aún me sigues poniendo a prueba. ¿Qué más puedes hacernos? ¿Qué hemorragia de maldiciones me ayudará a escapar de ti? No lo sé.

Noche a noche tras las persianas de mí morrada lloro desesperado y rezando a Dios le pido que te aleje de mí.

Millones de lágrimas por nosotros he llorado sin ningún fin.
Me levanto contigo, me dueles, me pesas y me haces sufrir. Miro al espejo y veo tu cara; y nuevamente me asusta pensar que te amo y tú sólo quieres vernos morir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario